Sobre el creador de la Terapia Gestáltica: FRITZ PERLS
La Terapia Gestáltica debe su nacimiento a las intuiciones
geniales y a las crisis personales de quien podemos considerar su
principal fundador: Friedrich Salomón Perls, conocido como
Fritz Perls.
Fritz nace el 8 de julio de 1893 en Alemania, en un gueto judío.
Es el tercer hijo de un matrimonio en el cual su padre, de carácter
irritadizo, era representante de vinos y viajaba mucho. Su madre judía
practicante, le encantaba el teatro y la ópera. Parece que
la pareja no se llevaba muy bien.
Fritz crece como niño problemático, a los trece años
lo expulsan de la escuela y el padre lo pone a trabajar, a los catorce,
por decisión propia se inscribe en una escuela más liberal
en donde descubre su amor por el teatro y en su adolescencia participa
mucho de diferentes escuelas teatrales.
Participa de la primera guerra y como judío fue perseguido.
En 1920 se recibe médico neuropsiquiatra. Sigue amando el teatro
y frecuenta cafés izquierdistas de Berlín, donde se
encuentra con poetas y artistas de la contracultura.
En 1926 decide ser psicoanalista. Tiene varios procesos psicoanalíticos
y durante dos años trabaja con Wilhem Reich ( coraza del carácter).
Trabaja como asistente de Kart Goldstein en el instituto de soldados
con lesiones cerebrales y con él comienza a descubrir el concepto
de “autorregulación organísmica” que será
clave en la terapia gestáltica.
En 1929 se casa con Laura Posner que será su colaboradora e
investigadora.
Con ella tiene dos hijos.
En 1934 viajan a África del Sur y fundan el primer Instituto
Sudafricano de Psicoanálisis. Se hacen muy famosos.
En 1936 en el congreso Internacional de Psicoanálisis de Praga
busca entrevistarse con Freud y es un encuentro muy frustrante para
Fritz, porque el padre del psicoanálisis no atendió
a sus inquietudes.
Publica su primer libro “Ego, hambre y agresión”
en colaboración con su esposa.
Comienza a gestarse la terapia gestaltica…. En Sudáfrica
conoce a Smuts fundador del Holismo.
Ocurre la segunda guerra y en crisis con su familia y con su vida
se va a Estados Unidos dejando todo. En Estados Unidos se vincula
con Karen Horney, Erich Fromm y Paul Goodman. Al año de estar
en Estados Unidos manda traer a su familia con Laura y sus nuevas
relaciones crearán la terapia Gestáltica. Continúa
su vida bohemia.
En 1951 lanzan el libro “Terapia Gestàltica” con
la colaboración de Goodman y Hefferline. En 1952 crean el primer
Instituto de Gestalt de Nueva York y en 1954 el de Cleveland. Fritz
entregará la dirección a Laura, a Goodman y a Paul Weisz.
Comienza una etapa de peregrinación, experimenta con LSD.
A los 70 años, en el año 1963 conoce a los beatniks…
viaja a Japón para participar en un monasterio Zen con la esperanza
de encontrar el Satori (iluminación).
A esa edad entra en crisis de nuevo. Participa en el Centro de Desarrollo
del Potencial Humano en Esalen.
Es considerado líder del movimiento hippie californiano. En
el 68 este movimiento se extiende al mundo y la sociedad esta pronta
para recibir a la Psicología Humanista y a la Gestalt.
En 1969 crea la comunidad de Vancouver, Canadá. Desea formar
un kibutz y trabajar básicamente lo grupal que es donde cree
que está la mayor riqueza.
En 1970 muere de un infarto.
TERAPIA GESTALTICA
“Gestalt” es una palabra alemana para
la que no hay traducción significa algo así como
“formación”,
“configuración”, “proceso de dar forma”.
La Terapia Gestáltica es una escuela que debe su surgimiento
a las geniales intuiciones, a las fuertes crisis y a la búsqueda
incesante de su creador principal Fritz Perls.
Fritz fue un genio y un emergente de una época y un contexto
mundial.
La Gestalt más que una ciencia es considerada un arte.
Dice Joseph Zinker en su libro “El proceso creativo en la Terapia
Gestaltica”: “La terapia gestáltica es un encuentro
existencial entre personas. En vez de adoptar a priori una visión
monolítica de la humanidad, permite a la persona revelarse
a sí misma en el proceso de ese encuentro. Tal es la causa
por la cual la terapia gestáltica se presta a sí misma
para la creación; tanto ésta como aquélla ponen
de relieve el despliegue de algo bajo forma pura, orgánica”.
La Terapia Gestáltica es hoy practicada como psicoterapia individual,
de parejas, de familia y grupos. En grupos de desarrollo personal,
instituciones y empresas.
Los psicólogos de la Gestalt (Kohler, Werthermeir, Lewin y
otros…) descubrieron leyes según las cuales organizamos
la percepción: Ley de Semejanza, Ley de contigüidad, Ley
de la buena forma, La totalidad es más y diferente que la suma
de las partes, un cambio en una parte afecta al todo. Ley de pregnancia,
Ley de figura-fondo. Fritz pudo tomar esas leyes de la percepción,
básicamente
sensorial, y ver que se aplicaban a la vida en su totalidad y al mundo
interno en particular. No hay manera de tener una visión objetiva
ni de uno mismo, ni del mundo. Siempre es subjetiva, y encontramos
en la vida lo que, de alguna forma, estamos determinados a encontrar.
Del Psicoanálisis, Fritz que fue psiquiatra y psicoanalista
toma conceptos claves y los modifica:
Cambia la dinámica “conciente-inconsciente” por
la dinámica “figura-fondo”.
Pone mayor énfasis en la energía de la agresión
que en la teoría de sexualidad y plantea que el desarrollo
de la personalidad del niño está más influenciado
por su capacidad de aceptar o rechazar.
Fritz considera importantísimo el instinto de agresión,
como una energía que le da soporte a la vida, para poner límites,
tomar decisiones, discriminar, elegir, conseguir algo, etc…
Propone cambiar la teoría asociacionista lineal por el campo
teórico de la Psicología de la Gestalt.
Cambia la pregunta básica del Psicoanálisis: ¿Por
qué? Por el ¿Cómo? Y el ¿Para qué?
Devolviendo así la responsabilidad a la persona de hacerse
cargo de sus actos.
Sugiere que la represión sexual no es la principal en este
tiempo, sino la represión afectiva y apoyándose en el
existencialismo sostiene que la gran carencia actual es la del sentido
de la vida.
De las Filosofías orientales el Tao y el Zen, toma el centrarse
en el presente, como único momento existente; lo que ocurre
está ocurriendo ahora, todo lo que se siente, ocurre en el
cuerpo y ocurre ahora.
Toma también la idea de la complementación de los opuestos,
yin y yang, y desarrolla el trabajo de polaridades.
Del Existencialismo toma esencialmente el concepto de que “ser
humano se hace, no se nace”. Y la idea de la responsabilidad
por los hechos de nuestra vida, más allá de lo que nos
haya tocado vivir…
Del Humanismo toma (entre otras cosas) esta idea de que “Somos
en relación” no existimos sin “el otro” .Y
entonces pone énfasis en lo interrelacional dentro y fuera
del espacio terapéutico.
Dice Joan Garriga Bacardi (Director de Institut Gestalt de Barcelona),
en su ponencia para el II Congreso Nacional de Terapia Gestaltica
en Madrid del 2002, denominada “Autorregulación organismica
y movimientos del alma, la Terapia Gestalt y la Terapia Sistémica
de Bert Hellinger”:
“La terapia gestalt es una terapia
relacional, pero ¿llega a ser sistémica?
Una forma de ubicar a la terapia gestalt es mostrando una de sus
paradojas más difíciles. Por un lado posee la atmósfera
del Tao y sintoniza con una fuente que mana o Principio indiferenciado
respecto al cual todo el resto serían sus manifestaciones
y por otro lado enfatiza y agranda un Yo que hace diferencias (recordemos
que Jean Marie Robine ha descrito el mecanismo de defensa específico
de la terapia gestalt como egotismo, y en clara alusión a
esta paradoja que describo, ha sugerido el paso de una egología
a una ecología). La propia oración de la gestalt de
Fritz expresa en forma sucinta y directa como la terapia gestalt
es dialógica, considera un yo y un tú, es relacional.
Pero aunque da un paso importante como terapia de contacto y de
relación y Fritz Perls habla de campo unificado entre organismo
y ambiente, mantiene claras reminiscencias psicoanalíticas
orientadas a los mecanismos intrapersonales y aún enfatiza
el yo por encima del contexto y el mundo interior propio y la regulación
de las experiencias emocionales por encima del poder de los sistemas
y redes de relación. Por un lado es una terapia espiritual:
confía en una fuerza misteriosa que de forma natural regula,
y por otro lado es una terapia de la identidad: el yo toma carta
de privilegio; y aún por otro lado es una insinuación
sobre lo relacional y por tanto un primer esbozo sistémico.
Si ciertamente la terapia gestalt concibe a la persona de un modo
inseparable de su ambiente, de soslayo resuelve dicha dialéctica
con una propuesta de refuerzo y concesión del poder al yo.
Lo cual, creo, no está mal, pero olvida de manera incauta
cómo la fuerza de yo es de pequeña comparada con las
tramas invisibles que rigen en la familia y que, a menudo, conllevan
guiones y destinos muy marcados; ahí la solución se
encuentra no tanto en un fortalecimiento del yo sino en un esclarecimiento
del nosotros, o sea, la familia a la que pertenecemos y la red de
vínculos en que estamos insertados.”
Como sea, la Terapia Gestáltica es una unidad coherente
y aplicable.
Pensamos que si Fritz viviera aún, seguiría evolucionando
y creciendo con ella. Ese siempre fue su espíritu: La búsqueda
y la integración. La Gestalt sigue viva, creciendo, evolucionando
y transformándose.
En ese camino estamos, y en él honramos y reconocemos a su
creador.